Accepto Aquest lloc web utilitza galetes -pròpies i de tercers- per recopilar informació estadística sobre la navegació i per mostrar publicitat. Per més informació, consulta el nostre avís legal.
Els mitjans del règim santifiquen Carles Sentís i amaguen el seu passat feixista

Per unanimitat tots els mitjans controlats pel poder han realitzat notícies hagiogràfiques sobre Carles Sentís, que va morir ahir als 99 anys. Aquest periodista i polític català va afavorir la Restauració borbònica i el continuisme sense ruptura democràtica. 

Sentís va formar part de l'exèrcit franquista que va ocupar Catalunya el 1939. Ben aviat va prendre part com a home de confiança de la premsa del règim i es va destacar com a un puntal del periodisme afecte al general Francisco Franco, publicant articles de clar contingut ideològic que legitimaven els crims de l'agressió feixista. Amb la mort del dictador va saber adaptar-se a la nova situació d'operturisme i es va perpetuar a la comoditat del poder polític i periodístic.

20/07/2011 01:54 Comunicació

Carles Sentís ha mort a l'edat de 99 anys, i ha estat elogiat per la major part dels responsables polítics actuals, que han omès el seu passat feixista i les seves responsabilitats durant la dictadura. Artur Mas i Jordi Pujol s'han desfet en elogis adreçats a Sentís.

Aquest periodista i ideòleg també ha estat assenyalat com un dels principals artífexs del retorn al Principat de Josep Tarradellas des de l'exili.

Durant els anys 40 va ser opinador del règim i corresponsal de guerra de  diaris com La Vanguardia. També va ser director de l'Agència EFE franquista, del diari Tele/eXpress, així com degà del Col·legi de Periodistes de Catalunya i president del Centre Internacional de Prems de Barcelona posteriorment.

 Malgrat el seu paper de responsable durant el franquisme, va ser guardonat per la Generalitat de Catalunya amb la Creu de Sant Jordi el 1986 i amb el Premi Nacional de Cultura per la seva trajectòria el 1998.

Sentís, a banda de formar part de l'exèrcit franquista, va participar activament com a intel.lectual del règim franquista, amb la redacció d'articles que legitimaven la "Cruzada" i els seus crims. Durant la II Guerra Mundial es va anar especialitzant com a periodista bèl.lic i internacional i amb els anys va adquirir importants responsabilitats de càrrecs periodístics durant la dictadura.

Alguns dels seus textos dels anys quaranta, com "Pase lo que pase en el Mundo" (1942) i "Finis Cataloniae" (febrer de 1939) són un exemple del seu paper d'intel.lectual de la dictadura franquista. Un passat negre, en què fins es recrea amb atacs antisemites, que els mitjans no han volgut recordar.

Precisament a "Finis Cataloniae" (febrer de 1939) -un article que invoca un intel.lectual ultradretà francès i que exalta el cop d'estat de Franco- Sentís va encuyar un terme demagògic que recentment CiU i mitjans com e-notícies han explotat fins la sacietat: "La Catalunya real". Sentís sentenciava "Aquella Cataluña acabó; pero la Cataluña real, que diría, vuestro y nuestro caro Charles Maurras, hoy, precisamente, empieza a amanecer." Sens dubte una mostra de fe als postulats feixistes de Mourràs i un "empieza a amanecer" que remetia a l'himne feixista.
 

"Pase lo que pase en el Mundo" (Publicat a La Vanguardia Española el 1942)

Pero quiero volver con Areilza exponiendo su «decisión», que es la de todos los que con pocos años y ya con mucha experiencia hemos hecho la guerra: «Pase lo que pase en el Mundo, sea cual fuese el destino de la contienda y su extensión en el tiempo y en el espacio, suenen en nuestros oídos canciones de sirena o sobornos morales, lo que se ganó en abril de 1939, centuries_sentsdespués de un cúmulo inmenso de glorias y penas, eso es firme y definitivo.

La fe católica de nuestros padres, la unidad de hombres y tierras españolas, el tesoro espiritual y político de nuestra tradición histórica, las instituciones que de ella se derivan, el respeto a la personalidad humana, son valores irrenunciables que están ganados para siempre. Y Junto con ellos nuestra fisonomía exterior de pueblo libre, atento en sus decisiones tan sólo al interés de España, sin supeditaciones ni prejuicios de ninguna especie.»

La física (manda. Y la biología. Las humaredas pasarán. Pero nosotros—un nosotros de millones— estamos aquí. Ideológicamente podría hundirse el Mundo y nosotros quedaríamos.

 

"Finis Cataloniae" (Publicat a La Vanguardia Española el 17/2/1939)

¡Dios mío! ¡Dios, mío! ¡Y que monótona es la Historia. Exacta, matemáticamente exacta, se podría hoy así describir esta serpiente de'«material » y hombres que por Port-Bou y El Pertus sale precisamente para Banyuls y Osseja, respectivamente. Dice Verdaguer que aquellas' huestes podían fajar en doble vuelta al- Rosellón.Esta nueva columna de hombres, de hierro y de acero — «oleadas de hombres a oleadas suceden; olas de hierro a oleadas de acero sin parar» — se extendía días pasados de Gerona a la frontera.


Más de una compañía, concretamente el 32 batallón de Infantería creyendo que por todas partes cuecen habas (lentejas en este caso), se negaba a desarmar y algunos puros pistoleros de las fuerzas del «Gouvernement» ya se habían escondido en los ejes de los vagones de la estación de Perpiñán, con sus bolsillos repletos de bombas de mano y sus pistolas-ametralladoras bajo el- brazo... ¡Pobrecillos!... Del primer puñetazo les han cerrado la boca del estómago...Infelices! Ellos desconocen el francés o, algunos, ni leer e1 periódico saben para enterarse que ya hoy en Francia son también los viarxistas, «los maíxistas presuntuosos», traducido literalmente de un periódico de izquierdas.


Los rojos, al volar los puentes, nos han causado un perjuicio real y tremendo. Real y tremendo a mí y a mi amigo, este audaz operador de la Cinematografía Nacional que parece arrancado de un film americano. Pero a las Divisiones Navarras o Marroquíes, al Ejército en general, estas voladuras han sido tan ridiculas como echar gravilla para impedir el paso de una apisonadora.
¡Pero los últimos puentes no estaban volados ya; les hubiesen cortado la propia retirada, como ya ocurrió a muchos grandes camiones de la D.C.A., que se han quedado a dos kilómetros de la frontera, inmóviles como rollizas perdices sorprendidas por el perro.


 Yo no sé si Aníbal por aquellos caminos, que hoy cubre el asfalto do la carretera, dejaba muchos huesos de elefantes. Ignoro qué dejaba en pos de sí el coloso de las anchas espaldas.
Pero en cambio he visto lo que ha dejado tras su huella este otro «coloso» de Negrín. Sencillamente ha dejado la mayor cantidad de restos de automóvil que se puede ver hoy en Europa los cementerios de Automóviles de Detroit ya sabemos que son insuperables.


¡Cómo se ha parecido esta Revolución (-en Cataluña) a una inmensa película de «gangsters»! ¡Qué copia tan siniestra de esta producción «standard», con la .cual la judía Hollywood invade el mundo!... Todos recordamos que las primeras manifestaciones de la revolución en Barcelona fueron los grandes coches aristados de «Parabellums» y «Hammerless» derrapando por el asfalto de la calle Balmes con los neumáticos chirriantes y enloquecidos.

(...)  Ya empiezan, pues, las peleas y el descargo del muerto. La desgracia no los hará más dignos. ¡El propio periodista francés me da el último ejemplar del «Candide», semanario amigo de la España Nacional.

En su primera página se lee: «LOS ÚLTIMOS DÍAS DE CATALUÑA.»«Finis Catáloniae».

Pero, por Dios!... Estos periodistas franceses no curarán nunca. Tras lo pintoresco, tras el afán'de dramatizarlo todo, caen en el folletín más falso.Señores,- un poco de reflexión: Bueno, sí: «Los últimos días de Cataluña»... la de Durruti... «Las últimas horas de Cataluña»... la de Companys... la de Negrín... ¡Perfecto! Pero Cataluña es algo más y algo más eterno que eso.


Eso no ha sido más que «The End», el cartelito de «Fin» de esta gigantesca ampliación de «Scarface» o.de «El Imperio del Crimen».


Aquella Cataluña acabó; pero la Cataluña real, que diría, vuestro y nuestro caro Charles Maurras, hoy, precisamente, empieza a amanecer."

 Per saber-ne més:

Sentís, Xammar, Barnils i el franquisme que no acaba mai

Sentís: mentiràs, però no enganyaràs

Adéu, espieta

El PSC lamenta la mort de Sentís i destaca la seva trajectòria El Diari.cat

Mas: "Va fer un bon servei" El Punt

Pujol valora la "mestria i humanitat" de Sentís Regió7

Carlos Sentís, «l'espion de Franco», mor als 99 anys Nacíó Digital

Suport de premsa tradicional i polítics a Carlos Sentís, mort avui Racó Català

 

 

Segueix-nos
Subscriu-te al butlletí
(cc) 2006 - 2024 · Comitium Suite · Dissenyat per Fuksia · Equip de Llibertat.cat - Avís legal - correu@llibertat.cat · XHTML vàlid